viernes, 29 de junio de 2012

Estaciones

Suele llegar un momento, en la que se necesitan y se acude a ellas. Verdaderamente no es entusiasmo lo que se siente al visitarlas, tan solo son un lugar de paso para lograr un objetivo, para llegar a otra parte. Nadie piensa en ellas de manera especial. Nadie suele tener momentos inolvidables ahí. De ninguna manera un grupo de personas iría a esos sitios para pasar un buen rato de manera cíclica.

Suelen ser, como ya he dicho, momentos puntuales. Con el tiempo incluso dejará de ser algo imprescindible, y ni se acordarán de que una vez las usaron.Así son las estaciones. Bus, tren... Tienen algo especial, unen y separan caminos, nos facilitan la vida, nos irritan...
Aún con todo, nadie tiene un espacio guardado para ellas en su memoria. Ni las recuerda con cariño. O ni las recuerda. Pero ahí están.

martes, 12 de junio de 2012

Entre luces y sombras

Cientos de palpitaciones. Incesantes, imparables. Han pasado tan solo unos segundos. Sin origen y sin destino. Sin razón. Sin pasado ni futuro. Tan solo presente incierto. Marchitable. Ojos cerrados combinados con los pensamientos. Bloqueados con una cerradura a la que nadie tiene acceso. Fracturas en lo fuertemente arraigado. Comienza a deshacerse todo. Momento de vacío. Oscuridad y nuevos reflejos de luz. Pero tan solo espejismos.
Los latidos van cesando. El frío vuelve a llegar. De nuevo todo sumido en la oscuridad. Pero con la huella presente.


domingo, 3 de junio de 2012

sábado, 2 de junio de 2012

Un año más

Incesante, pasa el tiempo. Otro mes de junio.
Ya no hay celebraciones. No quedan motivos para celebrar. En ese día ya no hay sonrisas, pero solía haberlas.

Me gustaría ser capaz de recordar alguno de esos días, pero no hay ninguna imagen en mi mente. Parecen haberse desvanecido lentamente, con los años.

Me gustaría tener alguna oportunidad para poder revivirlo, pero es imposible. El recuerdo de su imposibilidad recorrerá todos los años que me queden de vida. Cada año. Cada junio.